-Si tu novio te dijera que está
pasando por el peor momento de su vida y acudiera a ti ¿lo
acompañarías en su dolor?
-Sí. Sería como una mujer koala,
siempre le daría cariño, compañía, abrazos y besos.
-Si te dijera que no se merece tu amor
y que no te merece porque no puede hacer nada por vosotros como
pareja ya que no tiene fuerza para hacer nada por sí mismo dado la
situación que está pasando ¿qué harías o le dirías?
-Le diría que me merece porque él es
toda mi vida y mi felicidad y que afrontaremos lo que sea juntos, que
yo le ayudaré a estar bien como sea. Supongo que “asumiría el
mando” hasta que él estuviera bien para hacer cosas por nosotros
como salir de casa de vez en cuando... Le diría que si él no puede
hacer nada por sí mismo que yo estoy ahí y lo haré por los dos.
-Si te dijera que está muy triste y
deprimido porque su padre ha muerto y ya no le prepara el café por
las mañanas como hacía siempre y que la falta de aroma a café
recién hecho le hace llorar en silencio para que su madre no lo vea
mal cada mañana. ¿Qué harías?
-Fácil, me pondría el despertador
diez minutos antes cada día le daría un beso sin despertarlo y le
prepararía café cada mañana y de propina un buen desayuno,
probablemente tostadas o algo que le gustara mucho y le sonreiría,
las sonrisas se contagian... Le mimaría todo lo que pudiera y más,
le quiero muchísimo.
-Si te dijera que no tiene ganas de
hacer nada, que el hecho de que el mundo siga como si nada y que él
deba seguir con lo que le ha pasado lo deprime y enfurece. ¿cómo le
ayudarías?
-Aceptaría sus sentimientos, no le
forzaría a nada ni le presionaría, a veces hay que dejar que la
tristeza de alguien siga su curso y simplemente acompañar si él
quiere compañía. Le haría sentir cómodo en que no pasa nada si
durante un tiempo no quiere hacer nada. Me encargaría de todas las
cosas de él que fueran urgentes si él no está en condiciones para
ello y de las no tan urgentes como lavar, ir a comprar, cocinar...
Todo lo necesario hasta que él se encontrara mejor... Me quedaría
con él mirando a un punto fijo en la pared si necesitara eso, o
abrazados en el sofá entre almohadas y mantas viendo películas.
Simplemente le demostraría que estaré si me necesita y me iré si
se cansa de tenerme ahí...
Mi interlocutora me sonríe y me
pregunta:
-¿Crees que tienes soluciones para
todo? ¿o respondes por no dejar ninguna en blanco?
-No, sólo llevo años de práctica y
también es que cuando me enamoro no me dosifico... Me parece muy
romántico demostrar amor así, entregando el 150% de mí, no sé
hacerlo de otra forma, cualquier novia enamorada haría lo mismo...
-Si él te dijera que no puede
concentrarse, que no puede estudiar porque la mente se le va al
hospital y a lo mal que lo pasó esos días y todas esas noches allí
solo viendo morir a su padre... ¿Podrías hacer algo por él?
-Sí, haría todo lo posible por darle
esperanza y aliento, sería fuerte por los dos. Le ayudaría y le
prepararía un planning de estudio; organizándole las horas que debe
estudiar al día y los días que debe dedicar a cada asignatura, los
descansos que puede hacer, el tiempo para comer o ir a jugar a fútbol
si quiere... Le haría el planning en colores bonitos para que le
pareciera una de mis típicas cursiladas y se riera. Le sugeriría fraccionar
el estudio en 45 minutos de estudio por hora y quince de descanso.
Afrontaría esa preocupación con él para que no se viera solo ante
eso. Y probablemente, si no se tratara de algo de ciencias o
matemáticas, -de lo cuál no tengo ni idea-, estudiaría con él si me
necesitara. Le haría resúmenes, o le explicaría aquello que él no
entendiera si yo pudiera entenderlo... Haría lo que fuera, lo quiero muchísimo,
se merece aprobar es muy buen chico y ha sufrido mucho. Cualquier
novia haría lo mismo.
-Pero ¿si él insiste en que no se ve
capaz de aprobar, que la asignatura y el exámen son muy difíciles,
que ya lo ha suspendido dos veces con un 4'6 y un 4'7 respectivamente y eso que había
estudiado muchísimo...?
-Le recordaría quién es, lo que ha
conseguido y a dónde ha llegado académica y personalmente. Yo estoy
muy orgullosa de él, le diría que un exámen es un exámen y que ya
lleva muchos, que este no nos asusta, que él se lo come con patatas,
que yo creo en él. Le diría que me enamoré de su inteligencia y su
vocabulario entre otros millones de cualidades y que lo admiro
profundamente. Que me enamoré de su cultura en cosas que yo no
conocía y que he aprendido de él. Le diría que es normal su
sentimiento de incapacidad dada la situación que está pasando y
procuraría darle fuerza diciéndole que sólo siente y piensa así
por su tristeza. Que él es valiente para mirar el miedo a la cara
porque si ha visto morir a su padre y lo afronta cada día es que es
valiente y un exámen es una anécdota en la vida... Él puede
aprobar es un chico muy inteligente, todo el mundo se lo dice pero
tiene muy baja autoestima.
-Si tu novio no fuera tu novio y sólo un "amigo" que
te gustara muchísimo y te dijera que no puede
estudiar porque echa mucho de menos a su ex. Y que, aunque
suene muy tonto, se siente solo cuando está estudiando, como
desamparado, desarropado y que se le hace un nudo en la garganta
porque su ex solía acompañarle a estudiar y ella no está y que
además ella está otra vez presuntamente feliz con otro y él no puede
olvidarla y "encima se me ha muerto mi padre"... Recuerda que él está
muy depresivo porque siente que todo le va mal. ¿Podrías hacer
algo?
-Pues en ese caso le haría compañía
estudiando; me inventaría una excusa, aunque yo no tuviera que
estudiar le diría que sí tengo que hacerlo con tal de estar con él,
o que puedo estar con él en la biblioteca leyendo, que estoy
enganchada a un libro buenísimo y no me importa acompañarlo... Algo
se me ocurriría para hacerle compañía y evitar que se sintiera
solo. Le sugeriría hacer un planning juntos también, yo me entrego
desde el minuto uno... Me encanta ayudar y hacer cosas por el hombre
que quiero, me hace sentir muy bien ver que puedo ayudarle.
Y respecto a no poder estudiar porque
echa de menos a su ex y ella está con otro... Le diría que procure
dejar un tiempo y un espacio al día para pensar en eso aunque le
pueda sonar ridículo. Pero un tiempo y un espacio concreto, como si
tiene que fijarse una hora del día para llorarla pero que por el
amor de Dios tiene que salir adelante y olvidarla. Que ya no es la
primera vez que pasa por esto en exámenes por esta misma chica, que
ella no va a volver al menos por ahora y los exámenes no esperan por
nada ni por nadie. Él ya ha perdido oportunidades de presentarse a
exámenes por esta razón, porque ella en exámenes se fue con
otro y él no fue fuerte para estudiar a pesar de eso... Y no ha servido de nada perder oportunidades, sólo para que
sintiera que se había fallado a sí mismo... Le diría que es lo
suficientemente inteligente para saber que no es el momento de mirar
hacia su ex, que ella va a seguir haciendo lo que hace aunque estudie
él, o no, y entonces; ¿por qué no estudiar y afrontar esto al acabar
exámenes? ¿Por qué no luchar por sí mismo? Yo le ayudaré... Me
importa mucho su bienestar porque es muy bueno y muy sensible y ha
sufrido mucho por esta chica y se merece avanzar con su vida, aprobar
y sentirse bien por conseguirlo.
-La última pregunta, si tu novio te
dijera que cree que tal vez necesita una psicoterapia -pero que le
parece caro pagar 65 euros semanales- porque ve que él sólo no puede superar su depresión.
Y además, su familia, amigos y tú lo veis muy deprimido y ponéis
de vuestra parte pero no parece servir de mucho, sólo algunos días
parece que está mejor pero sospecháis que finge porque os quiere y
no quiere preocuparos... Él insiste en que le parece muy caro pagar
65 euros a la semana “por eso”, que además él no tiene el
dinero, que está en paro o estudiando y te pidiera ayuda económica
¿le pagarías tú las sesiones, o le dirías que no, que es caro?
-Haría lo que fuera por costearle las
sesiones, por ejemplo; pidiendo prestado a mi familia, echando mano
de mis ahorros, pidiendo prestado a un amigo de confianza, pagándolo
a medias con sus padres... Lo que fuera. Me privaría de salir a
cenar, al cine, de comprarme ropa, o de salir de marcha por ayudarle
a pagarlo. Si él lo necesita y ahora no tiene el dinero lo ayudaría
y le quitaría de la cabeza lo de que “es caro”, lo importante es
que él esté bien, eso no tiene precio... Yo no podría dejarle en
la estacada diciendo que es caro buscaría el dinero como fuera y le
haría ver a él que no es tanto si piensa por un momento en el
dinero que ha malgastado tratando de sentirse mejor sin éxito, como
por ejemplo; en salir, en beber y en fumar y eso sólo le perjudica.
Realizar una psicoterapia cuesta dinero, pero al menos no perjudica
su salud, deseo verle bien porque le amo y es muy joven para darse la
mala vida que se da a sí mismo...
***
Esto es amar demasiado, así es como se
hace, así es como se siente y se vive ser una perfecta mujer que ama
demasiado. Qué bien se me daba ser la chica o la novia que contesta
a esas preguntas basándose en las cosas que hacía y cómo me cuesta
no volver...
El novio del diálogo soy yo -(o
cualquiera de vosotras que me contáis cosas muy similares)-, pero lo
más sórdido es que también soy la novia con soluciones para estos
duros y complicados problemas. Está claro, sólo tengo que hacer por
mí todo lo que he dicho -(y he hecho siempre)- por él. Pero
cómo me cuesta hacer para mí todas estas cosas que me resulta tan
fácil hacerlas para él y que por él las hago con
todo el amor del mundo. Pero todo el amor que tengo por él y
todo mi esfuerzo porque esté bien, está en mí, es mío. Tengo que
integrarlo para mí, hacer que forme parte de mi vida porque necesito
hacerlo y él no va a venir a salvarme de la soledad, de la
tristeza, ni de la muerte de mi padre. Pero yo lo creí así y me
avergüenzo pero lo reconozco, creí que él podría salvarme porque me lo
merecía, yo sola me creí que él sería la solución a mi
tristeza. A veces, me resulta casi insoportable la soledad, la
añoranza y la tristeza que siento sobretodo por mi padre como es evidente y después
por él... Y ¿es muy triste o alomejor sólo me parece triste
por la situación que estoy pasando? Puede que ambas.
Tengo que ir a la cocina dónde ya no
hay ni habrá nunca cafetera al fuego y hacerme el café con una
sonrisa, hacerme un planning que me guste y me sienta capaz de
cumplir, hacerme compañía a mí mima cuando estudio, tragarme el
nudo en la garganta por estudiar sola pagando el precio de
“todos-se-han-licenciado-y-tú-no-porque-se-ha-muerto-tu-padre” y
decirme “pero puedes estudiar sola y debes hacerlo igual que
estudiarías con él para ayudarle y hacerle compañía”.
Debo abrazar mi tristeza, mi soledad y
mi añoranza con el mismo amor que lo abrazaba a él en
idéntica situación. De la misma forma que lo miraba a él,
con la compasión, la lealtad y la fidelidad de no abandonarlo con su
pena...
Quiero aprender que en la vida hay que madurar
y que “ajo y agua” con lo que nos viene a cada uno y mirar hacia
adelante; porque por él, yo he sido y sería, fuerte por los
dos. Ser capaz de ser fuerte por él y por mí cuando él
lo estaba pasando mal indica que me sobra entonces mi propia fuerza para
invertirla en mí. Pero juro que estoy muy triste, fuerte para
luchar, sí, pero triste y echo mucho de menos a mi padre...
Además también me siento sola porque
lo echo mucho de menos a él y no va volver porque es feliz
con otra. Y hay que ser valiente para decir “te quiero" pero más aún
para asumir “ya no te quiero”. Quiero ser valiente y madura para
asumir que alguien ya no me quiere aunque me reviente por dentro...
Echo mucho de menos la forma en que él fingía que me quería.
Debo asumir mi derrota, que le he perdido... es importante aprender a
perder aunque duela y aunque se pierdan muchas personas queridas a la
vez. Quiero saber soltarme de alguien y no querer demasiado para no
volver a vaciarme demasiado.
Aún con pena, con rabia, con pereza,
con dolor, con desesperación debo hacer todo esto sola, y quiero
hacerlo, pero aunque no voy tan mal, me está resultando muy difícil. Quiero hacerlo para no creerme nunca más que el "él de turno" me
salvará y/o me querrá si yo le ayudo o salvo primero. Si lo consigo
sola, podré decir cuando venga otro -si es que viene-: “lo siento
príncipe, ya he matado al dragón que me daba miedo, ya no te
necesito”. Ese día estaré bien y seré libre porque no necesitaré a nadie. Aún no he
llegado, sigo por el camino para llegar allí; hoy en mi camino me repartiré las horas entre llorar y estudiar un
poco, porque ese es el consuelo y el apoyo que le daría a mi novio y
que me voy a dar a mí misma. Básicamente porque a todas luces´, no sé si más que él, pero me lo merezco.
Esta canción fue especial por una historia que tuve hace unos años:
nos hacíamos daño y no nos dejábamos marchar, solíamos poner esta canción en facebook...
nos hacíamos daño y no nos dejábamos marchar, solíamos poner esta canción en facebook...
Hoy quiero darle otro significado nuevo:
"maldita dulzura la mía si no la invierto en mí y la invierto en atarme a otro que me hace daño
y en atarle a que me necesite para que no se vaya".
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